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Partida
de Aristómeno Porras conmueve a evangélicos latinoamericanos ALC. El escritor y pastor colombiano Aristómeno Porras, conocido también con los seudónimos de Luis D. Salem y Uriel D. Azur, falleció el martes 1 de julio en esta ciudad, víctima de una penosa enfermedad que lo aquejaba desde hace tiempo y le impedía caminar. Porras, que tenía 86 años de edad, fue director de la revista La Biblia en las Américas durante 22 años y columnista desde 1976 de periódicos como Excelsior y Ultimas Noticias. Residía en México, con su esposa Gabrielina, desde hace varios años. Publicó
22 libros, entre los que figuran: Huerto
místico, El Dios escondido de los libertadores, Romancero Bíblico,
Muijeres de la Biblia y La Biblia en la poesía de habla castellana. Loida
A, Ortiz, coordinadora de Publicaciones de las Sociedades Bíblicas
Unidas, declaró desde Miami: Escribir sobre este gran hombre es muy difícil.
Difícil porque hay tanto que decir que resulta discriminatorio hacer una
selección. Nació en Colombia, pero pasó gran parte de su vida en México,
tierra que amó. En 1962 le solicitaron organizar el Departamento de
Información, Promoción y Proyectos para las Américas, de las Sociedades
Bíblicas Unidas. Las oficinas estaban en México. Durante 24 años
salieron de esa oficina materiales para la celebrar el Día de la Biblia,
programas para radio y televisión, lecturas bíblicas diarias, filminas,
doblajes de películas al español, y la revista La Biblia en América
Latina, de la cual fue director. Hace
un tiempo se le solicitó recopilar la historia de las Sociedades Bíblicas
en las Américas. Cuando comenzó el trabajo escribió: “Grata la tarea
que Dios me asignó para los días de la vejez. Grata porque, además de
mantenerme ocupado, me hace pensar en una tarea que amo y a la cual he
dedicado varios años: el estudio y la distribución de las Sagradas
Escrituras». Aristómeno
Porras estudió teología y literatura. Escritor y poeta, hasta los últimos
días de su vida se mantuvo escribiendo y hablando de la Biblia. En
febrero de 2001, dijo Loida Ortiz, recibimos una nota que decia: "Yo
camino siempre, pero ya puedo leer y escribir muy poco, la vista ha decaído
mucho. Siempre leo ayudado por una lupa y en las mañanas porque al
atardecer ya caen sombras en mis ojos”. Siempre mantuvimos buena
comunicación y publicábamos sus artículos cada vez que nos los compartía,
agregó Ortiz. Uno
de sus temas favoritos era la Navidad. Como fruto de tal realidad escribió
dos libros con ese tema: Rimas del
pesebre y Figuras estelares de
la Navidad. Alfredo
López Austin lamenta que Carlos Salinas haya promovido el retroceso de la
civilidad republicana La Jornada, 4
de agosto de 2003. México está en riesgo de perder su laicismo y
retroceder "de manera peligrosa" hacia la intolerancia y el
enfrentamiento grave e innecesario entre la población, advirtió Alfredo
López Austin, investigador emérito de la Universidad Nacional Autónoma
de México (UNAM), al señalar que ser religioso no es sinónimo de poseer
una moralidad elevada, como prueban George W. Bush, Ariel Sharon,
Condoleezza Rice y tantos personajes que manchan de "horror y
sangre" el siglo XXI El
historiador destacó que las matanzas contra el pueblo de Irak se
perpetraron con el pueril argumento de que Bush es brazo armado de una
divinidad que no puede obrar en el mundo si no es con el auxilio de
"tan distinguido representante". Por
otro lado, indicó que hasta donde existen registros documentales, puede
constatarse que las ideas religiosas se han usado en todo el mundo y a lo
largo de la historia con fines políticos. En el caso del México, después
de que por más de un siglo el meollo del problema religioso se había
resuelto en la vida ciudadana del país, el Poder Ejecutivo, entre 1988 y
1999 (con Carlos Salinas), promovió el retroceso de la civilidad
republicana al dar pie para el debilitamiento del laicismo, apuntó. En su
momento, muchos advirtieron sobre los efectos nocivos de contaminar lo
religioso con lo político, y los hechos demuestran la razón de tales críticos;
asimismo, ponen en guardia contra una acelerada intervención de la
jerarquía religiosa en la vida pública, que puede conducir a resultados
sumamente negativos, añadió el renombrado académico. En
un comunicado de la UNAM, López Austin señaló: "el crucifijo en
las manos del Poder Ejecutivo
no son ejercicios de fe, sino argucias publicitarias con fines políticos.
Son construcciones de imagen personal a través de los medios de
comunicación y una burla a la sinceridad de los creyentes". En
este sentido, destacó, "no deberá permitirse en un régimen laico
que la Iglesia ejerza presión política para que se cumplan sus
postulados sobre toda la población, pretendiendo sustituir con la fuerza
pública su incapacidad de persuasión moral". López Austin,
investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas, manifestó
que mientras "la defensa de una visión particular del mundo es
respetable, la imposición de dicha visión resulta intolerable".
Además, añadió, una religión vigorosa es la que no necesita del apoyo
estatal, mucho menos de la fuerza pública para instaurar sus verdades.
Recalcó que el laicismo es uno de los grandes triunfos de la civilización
contemporánea y otorga al ciudadano común la igualdad plena con total
independencia de su pertenencia a un credo o de la ausencia de credo en su
concepción del mundo. "Todo individuo debe ser libre de la imposición
basada en las diferentes creencias." Por
otro lado, manifestó, el laicismo garantiza al creyente la libertad, la
tolerancia y el respeto a su fe, pues lo hace quedar a salvo de las
obligaciones que ya desde su propia Iglesia o de las ajenas pretendan
interferir en su sano arbitrio y en su criterio personales, bienes
indispensables para el ejercicio recto de cualquier credo. La teología de la liberación
no ha muerto, señala Gustavo Gutiérrez Carlos
Fazio, La Jornada, 8 de agosto
de 2003 Sao
Paulo. "Aquí estamos, con algunas cicatrices y algunos hematomas,
que en castellano se dice también... cardenales", dijo a modo de
presentación Gustavo Gutiérrez, considerado uno de los
"padres" de la teología de la liberación. "Con memoria
pero sin nostalgia. Con algunas preguntas. Y con el dolor que viene de ser
testigo de un pueblo pobre y marginado". De hablar fluido, hilvanado y profundo, Gutiérrez siempre tiene el
recurso del humor a flor de labios. Sobre la cuestión del
"agotamiento" y las múltiples "muertes" de la teología
de la liberación, expresó: "No hay tal cosa. Pero si murió no me
enteré. Por lo menos no me invitaron al entierro". Agregó que en la
"muerte" (como silenciamiento) de alguien o algo siempre hay
grandes intereses y "una suerte de afición tanática. Pero eso no
importa. Si se muere, seguiré. Tampoco es bueno 'almidonar' la teología
como un negocio. Aunque siempre existe el peligro pequeñoburgués de la
casa propia". La gente reunida en el auditorio donde se lleva a cabo la
conferencia sobre el cristianismo en América Latina y el Caribe escuchó
con atención a este pequeño peruano que estudió en Lovaina y Lyon y en
los albores de los 60 se sumó a la "caminada liberadora", dejándose
llevar por los aires renovadores impulsados por Juan XXIII y el Concilio
Vaticano II. "Un camino marcado por dos figuras clave: el obispo
chileno Manuel Larraín, presidente del Consejo del Episcopado
Latinoamericano (Celam), y el sacerdote Hélder Cámara, de Brasil. Una
caminada en busca del pobre. Con luces y sombras, avances, retrocesos y
traiciones. Y muchos mártires". Eran aquellos años difíciles. El desborde de la violencia y la
emergencia de movimientos radicales de cambio, con una nueva conciencia
política y social, alarmó a Estados Unidos. El Informe Rockefeller, en
el contexto de la guerra fría,
trazó las directivas del imperio para la etapa. Brasil, en el 64, inició
la cadena de nuevos regímenes militares. Ya no eran caudillos los
golpistas. Fueron golpes institucionales, de los ejércitos del área. La
región quedó inundada en un mar de dictaduras castrenses. "Incluso
el 68, año de la conferencia de obispos latinoamericanos en Medellín, no
fue un año optimista como se nos hizo creer. Recordemos la matanza de
Tlatelolco, el Acto Institucional No. 5 de los gorilas
brasileños y a los regímenes represivos de seguridad nacional". El gran tema de la teología de la liberación, surgida en Latinoamérica,
en la "periferia" del mundo capitalista industrializado, ha sido
y sigue siendo el pobre. El pobre como sujeto histórico. Con voz propia.
Recordó Gutiérrez que durante mucho tiempo en la Iglesia católica, y
hasta el pontificado de Pío XII, se habló de una diferencia entre ricos
y pobres como "voluntad de Dios". La pobreza como ineluctable.
Pero en Medellín los obispos hablaron de una miseria que margina. De una
violencia institucionalizada y de la necesidad de cambios de estructuras.
Y de una "liberación" del hombre y la mujer latinoamericanos,
como oposición a "dependencia". En el renovado vocabulario posconciliar del catolicismo surgía la
pobreza como "mal masivo, padecido por pobres reales".Y eso llevó
a hablar de la pobreza como "muerte". Como un grave y complejo
problema humano, no sólo social. Como un desafío global y un "escándalo".
Después, en Puebla (1979), surgiría la opción preferencial por los
pobres. "¡Pero la pobreza sigue estando allí, gritando!",
clama a su vez Gutiérrez. "Hoy, en la posmodernidad neoliberal, se insiste en que la
pobreza no tiene causas. Se nos dice que no se debe hablar de opresión.
El pensamiento único nos recalca que no hay otra salida al sistema. Pero
en el fondo de las cosas existe una situación inhumana que sigue siendo
un escándalo, como dijeron los obispos en 1968. Por eso, el gran reto es
enfrentar la pobreza desde el pobre. Otro mundo es posible". Planteó que otro gran desafío de cara a la ideología neoliberal
es el de la justicia. El credo neoliberal reza "padre nuestro que estás
en los cielos... quédate ahí. No nos molestes", dijo con sorna
Gustavo Gutiérrez. El sistema dominante, su economía, genera
"marginación, insignificancia y pobreza. El pobre no es nada. No
cuenta en este mundo de marginación. ¡Si Kafka viviera en la realidad
latinoamericana sería considerado un autor costumbrista!". Aclaró,
no obstante, que no se trata de una "idealización de los pobres.
Muchos tratan de salir de la pobreza pisando a los demás. Además, la
población entera, no sólo los pobres, están bajo la presión constante
y manipuladora de los medios masivos de comunicación". La epístola de Priscila
En
una sociedad patriarcal, las iglesias cristianas de las distintas
denominaciones eran las instituciones machistas por excelencia. Las
mujeres estaban relegadas. Aunque las cosas no han cambiado mucho, los
vientos liberadores auspiciaron un nuevo liderazgo de la mujer y surgieron
en su seno teólogas como Elsa Tamez, una biblista ecuménica
centroamericana (sic) graduada
en Lausana, Suiza. De manera poética y con gracia, durante su intervención en la
conferencia Tamez arrancó risas hablando de temas serios. Su "epístola
de Priscila", en código bíblico figurado, recorrió la geografía
latinoamericana y sus males y hasta dijo que "el padre Amaro y otros
abusivos le apretaron el alma de pura tristeza". Negó, también, que la teología de la liberación haya muerto. Y
que la opción preferencial por los pobres sea "cosa vieja", de
la teología de los años 60. Preguntó: "¿Acaso los pobres tienen dónde
dormir? Crecieron el desempleo, la incertidumbre y la desigualdad. El
mundo está lleno de oprimidos". Para reafirmar que la opción por
los pobres y excluidos está hoy más vigente que nunca. Pidió a los asistentes al encuentro, en su mayoría teólogos y
académicos de disciplinas políticas y sociales, "ecuanimidad y
autocrítica", y "no temer a las jerarquías y las
instituciones". Dijo que "la ideología del mercado sobre el
consumo y sus medios de comunicación", han exacerbado el
individualismo y la ignorancia. "La gracia
está siendo suplantada y la salvación
entró al mercado". También expuso que "las teorías de género" pueden
ayudar a "reconstruir la identidad masculina y femenina que vivimos,
la cual es falseada e impuesta por los valores de la ideología machista y
patriarcal de nuestra sociedad". A modo de sospecha, señaló que
"hay temor al discurso teológico de las mujeres". Para rematar:
"Creo que no hay que tener miedo a la participación de la mujer en
las iglesias. Ellas traen novedades y enriquecen la teología". Y
todavía se dio tiempo de pedir: "Oremos por la salud de los buenos
obispos que nos quedan..." Que por cierto, no son muchos. Samuel
Kobia, de la Iglesia Metodista de Kenya, nuevo secretario general del
Consejo Mundial de Iglesias ALC. Ginebra, Suiza, 28 de agosto. La elección del metodista keniano Samuel Kobia como secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), hoy aquí, suscitó favorables reacciones del obispo metodista emérito Aldo Etchegoyen y del secretario general de la Federación Luterana Mundial Ishmael Noko. Kobia,
que es el primer africano que accede al principal cargo ejecutivo del
organismo ecuménico global, fue elegido esta tarde por el Comité Central
del CMI. La
votación realizada en una sesión a puertas cerradas, arrojó 78 votos a
favor de Kobia y 52 votos por el canónigo noruego Trond Bakkervig, quien
era el otro candidato propuesto por el Comité de Búsqueda que, durante
varios meses, entrevistó a los postulantes. Hubo cuatro abstenciones. La
elección fue decidida en una sola vuelta. Aldo
Etchegoyen, que es secretario general del Consejo de Iglesias Evangélicas
Metodistas de América Latina y el Caribe (CIEMAL) y fue integrante del
Comité de Búsqueda del CMI, declaró que la elección de Kobia es una señal
significativa para las iglesias del Sur. Particularmente cuando esta reunión
del Comité Central debe tomar acuerdos para la realización de la
Asamblea del CMI en Porto Alegre, Brasil, el 2006. Por
lo demás, anotó, los dos candidatos son personas conocedoras de la
problemática de los países del Tercer Mundo. Al
resaltar que es la primera vez que un africano es elegido para tan alta
responsabilidad, Etchegoyen anotó que de esta forma las iglesias de
Africa continuarán aportando los dones de sus dirigentes y de sus
trabajos para el enriquecimento del movimiento ecuménico. América
Latina tiene en Kobia un secretario general que le dará acompañamiento
pastoral y que asumirá un compromiso en favor de la vida, declaró
Etchegoyen. Por
su parte, Noko enfatizó que Kobia asume su nueva responsabilidad
con amplios antecedentes y larga experiencia, tanto dentro de su
congregación, la Iglesia Metodista de Kenya, como en el campo
internacional, particularmente dentro del CMI. La
sede de la FLM se encuentra también en Ginebra y Noko congratuló a
Kobia, resaltando su amplia competencia internacional en el área de la
paz y la reconciliación. Tiene gran conocimiento de las dimensiones de la
vida de la iglesia en el hemisferio sur, dentro de la diversidad de la
iglesia universal, indicó. Además,
dijo, Kobia tiene gran conocimiento de la naturaleza y retos que afronta
el CMI como organización. Su humildad y su capacidad de escuchar
atentamente son cualidades personales de Kobia muy apreciadas, anotó. La
FLM considera al CMI como un cuerpo global en el que las iglesias del
mundo pueden comunicarse y cooperar sobre la base de la fe común en un
Dios Trino, para servir a la unidad cristiana y al bienestar de la humanídad,
declaró Noko. Tras
señalar la relación cotidiana existente entre las organizaciones que
comparten el Centro Ecuménico de Ginebra, Noko señaló que la FLM y el
CMI cooperan en la atención de las emergencia a través de Acción
Conjunta de Iglesias, en el área de las comunicaciones mediante la
agencia Ecumenical News International (ENI) y en otros programas. Por
otra parte, tanto Kobia como Bakkevig son amigos, ambos han trabajado
juntos en el CMI y se supo que antes de la elección se comprometieron a
apoyarse mutuamente cualquiera fuera el resultado de la votación. Como
demostración de esa confraternidad, ingresaron juntos al lugar donde se
realizó la elección y fueron recibidos con nutridos aplausos. Kobia
asumirá sus funciones en enero próximo, cuando pase al retiro el actual
secretario general del CMI, Konrad Raiser, de la Iglesia Evangélica de
Alemania, que ha ejercido el cargo desde enero de 1993. Al
conocer su designación Kobia declaró: "El CMI es ante todo y
principalmente una fraternidad de iglesias cuyo propósito principal es
procurar la unidad visible de todos. Tenemos que trabajar juntos y seguir
trabajando juntos". EL
CMI fue fundado en 1948 y tiene como miembros a 341 iglesias de
virtualmente todas las tradiciones cristianas. Aunque la Iglesia Católica
no lo integra, tiene representantes en algunos de sus organismos y
cooperan en algunas áreas. La
Asociación Teológica Ecuménica de México invita a su Primer Encuentro
teológico Nacional Su objetivo es: “Encontrarnos teólogas y teólogos para
reflexionar en torno a los desafíos que el contexto nacional y
latinoamericano de hoy plantea al cristianismo”. El contenido temático
será el siguiente: (con el pasaje de Emaús, como marco, Lc 24, 13-35) 1°.
Nuestro caminar como Iglesias: quienes somos y de donde venimos.
“Nosotros pensamos que él iba a liberar a Israel...”. 2°.
El contexto nacional, en el marco de la globalización. 3°.
La Sagrada Biblia: iluminación de nuestro caminar en el contexto. “...
les explicó lo que había sobre él en todas las Escrituras”. 4°.
Rostros y sujetos que caminan. “Entonces se les abrieron los ojos y le
reconocieron ...” 5°.
Alternativas hacia adelante. “Y, levantándose al momento, se volvieron
a Jerusalén”. Fecha: 23 y 24 de
septiembre de 2003, de 9 am. a 6 pm. El día 25, por la mañana, tendremos
la Asamblea de Socios. Lugar: El Altillo, Av.
Universidad, muy cerca del metro Miguel Ángel de Quevedo. Costos: Asociados: $
150.00, no asociados: $ 300.00 Informes: Miguel A. Sánchez,
tel: 59 50 40 00 ext. 7510, serecumenico@hotmail.com
o angel.sanchez@uia.mx Nueva
película cuenta el itinerario espiritual y político de Bonhoeffer Nueva
York/Ecumenical News International. Un nuevo documental acerca de la vida
del teólogo alemán Dietrich Bonhoeffer, ejecutado en 1945 por su
participación en un complot para asesinar a Adolfo Hitler, cuenta uno de
los más extraordinarios —y en cierta medida improbable— itinerarios
teológicos del siglo XX. Nacido
en una prominente familia de intelectuales en Berlín sin particular interés
en la religión, Bonhoeffer se convirtió en pastor y teólogo luterano. A
raíz de su muerte, atrajo amplio interés tanto por su martirio a la edad
de 39 años, como por su rico legado teológico en escritos como El precio de la gracia, Ética y Cartas
y papeles desde la prisión. “No
sabemos a dónde habría llegado teológicamente si no hubiera muerto”,
ha dicho Martin Doblmeier, director del documental de 90 minutos titulado Bonhoeffer,
que fue presentado al público por primera vez en Nueva York el pasado
mes de junio, después de haber sido mostrado en iglesias de todo el país
durante 2002. Los
liberales admiran el compromiso social de Bonhoeffer, mientras que los
conservadores admiran su pensamiento cristocéntrico, concede Doblmeier.
Pero unos y otros todavía debaten por qué un pastor y teólogo que había
abrazado el pacifismo, eventualmente se unió a un complot para asesinar a
Hitler. Entre
los aspectos destacados del documental se encuentran las entrevistas
realizadas a Eberhard Bethge, amigo y biógrafo de Bonhoeffer, que murió
en el 2000, y entre los contemporáneos a Desmond Tutu, ex arzobispo
anglicano de África del Sur. En
el mes de octubre el Centro Basilea proyectará esta película y hará un
debate sobre la misma. Presenta Jorge Tercero su disco
compacto No volveremos a casa Originario
de Tapachula, Chiapas, Jorge Tercero creció rodeado de la música y de la
Biblia, ya que su padre, pastor evangélico, le infundió principios bíblicos
básicos para desarrollarse en el ministerio, además de que, desde los 13
años, formó parte del grupo de alabanza de su iglesia. Por ello, su
interés por la música se desarrolló al tomar clases de órgano melódico
y escuchar a los grupos que visitaban las iglesias de la localidad. A los
18 años organizó el grupo “Holocausto”, que se presentaba en
diversos eventos sociales, así como en universidades, plazas y escuelas,
contribuyendo también a que otros grupos elevaran su nivel musical. Luego
de servir durante un tiempo en su comunidad, formó parte del grupo
regiomontano “Generación de Jesús”, primero como arreglista y
tecladista, y después como vocalista principal, presentándose en México,
Centroamérica y Estados Unidos. Tras
cuatro años de intensa actividad, inició su preparación teológica y
pastoral en la Comunidad Teológica de México, donde actualmente cursa la
licenciatura. Como fruto de esas dos disciplinas (la música y la teología),
Jorge sintió la necesidad de plasmar en una grabación parte de sus
vivencias y proclamar el mensaje bíblico mediante la música. Este disco
compacto, titulado No volveremos a
casa incluye temas representativos como “El misionero”, “Tu
silencio”, “Un mundo diferente” y “Amor universal”, con arreglos
fusionados de corte pop, dance, rock y jazz. En la producción de este
disco intervinieron músicos y cantantes de la talla de Andrés Castillo
(ex Caló), Rosendo y David Pérez (Jaime Murrell, Yuri, Tierra Prometida,
Armando Flores), “El Británico” (Estudios Disney) y Paco Arcos
(Alejandra Guzmán, Carmen Salinas), entre otros. Además, revisó
arduamente las letras de los cantos con un profesor de teología y
literatura.
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